Las actividades de ocio como leer, hacer crucigramas, sudokus o, incluso, aprender un idioma, fortalecen las funciones cognitivas como el lenguaje, la atención y la memoria
El envejecimiento es un proceso de cambio y adaptación a nuevas situaciones: el pelo se blanquea, salen arrugas, las orejas y nariz aumentan de tamaño, se pierde agilidad…y, cómo no iba a ser menos, el cerebro también vive transformaciones. Éstas pueden ser:
- Saludables: originadas por la propia edad tales como la reducción del peso, el volumen o el metabolismo neuronal.
- Patológicas: producidas por la presencia de una enfermedad de las llamadas demencias
Ahora bien: ¿qué podemos hacer para mantener saludable nuestro cerebro?