¿Cualquier grado de ansiedad es malo?
Disponer de cierto grado de ansiedad, nos ayuda a desenvolvernos de manera eficaz en situaciones de la vida cotidiana que consideramos "amenazantes" como, por ejemplo, un examen o una entrevista de trabajo
La ansiedad la podemos definir como una anticipación a una situación desagradable, que nos desencadena preocupación e inquietud. A pesar de su aparente connotación negativa, en nuestro día a día, resulta fundamental contar con cierto grado de ansiedad puesto que nos permite tomar las medidas necesarias para hacer frente, de manera adecuada, a esas situaciones que consideramos "peligrosas". Por ejemplo, de cara a un examen es posible que, de no contar con cierto grado de preocupación, no nos esmeremos en prepararlo y, en consecuencia, los resultados no sean los esperados.
Dicho esto, resulta interesante distinguir entre dos tipos de ansiedad:
- Ansiedad como estado: alude a un estado emocional transitorio propio de un evento concreto, que percibimos como amenazante.
- Ansiedad como rasgo: hace referencia a una tendencia a percibir cualquier situación, por simple que nos pueda parecer, como peligrosa o problemática. Es por ello, que las personas que suelen presentar este tipo ansiedad son más propensas a desarrollar trastornos relacionados.
Es de importancia señalar que cuando la preocupación supera cierto grado de intensidad, así como su función adaptativa, nos encontramos ante un trastorno de ansiedad. En él, la persona se encuentra muy nerviosa y con un temor excesivo, presentando, en muchos casos, pensamientos intrusivos, irritabilidad, dificultades para concentrarse y sensación de desbordamiento a nivel psicológico. De igual forma, a nivel físico, podría tener palpitaciones, sudoración excesiva, disnea o problemas digestivos.
Por tanto, este grado de ansiedad supondría un malestar significativo en la persona hasta el punto de generarle un problema para desenvolverse correctamente en los diferentes ámbitos de su vida. En consecuencia, es posible que una opción recurrente sea la evitación de aquellas situaciones que le generen incomodidad.